La vicepresidenta apuntó contra la Corte Suprema y alertó “que se van a animar a todo”. Ratificó que no será candidata y al cuestionar alto tribunal advirtió: “Vienen por el sistema democrático y les basta con una cautelar para suspenderme”. También defendió la gestión de Massa y exhortó a un acuerdo entre todos los partidos para resolver la economía bimonetaria.
La vicepresidenta Cristina Kirchner apuntó a la Corte Suprema y afirmó que «parece que se van a animar a todo», al cuestionar los fallos que suspendieron las elecciones en Tucumán y San Juan, y advertir que podrían avanzar contra Formosa.
«Basta con una cautelar para suspenderme», expresó al referirse a su situación personal, días después de haber ratificado que este año no será candidata a nada. Según resalto, «la Corte se ha convertido en un dispositivo de persecución». A la vez, consideró que el máximo tribunal «es una camarilla de tres personas. Vienen por el sistema democrático», enfatizó.
«Hacer política en un set de televisión y en Tribunales es lo más fácil que hay, el tema es cuando llegan al Gobierno», aseguró la titular del Senado durante una entrevista televisiva por C5N, y deslizó una mención a Javier Milei, al señalar que debe ser la política «de la casta» que da menos notas.
Al apuntar al «partido judicial», resaltó que fue «brutal la foto de Lago Escondido», donde dirigentes políticos, jueces y fiscales realizaron juntos un viaje. «Se vio claramente, es como la infidelidad, alguien puede sospechar, pero una cosa es verlo y otra suponerlo», resaltó.
Al ser consultada sobre si solo era por la cuestión judicial que no se presentaba como candidata, la ex presidenta señaló: «Estoy en libertad condicional técnicamente y no es una frase que quede bien, es la realidad». Pero aclaró, sobre las cuestiones políticas: «Claro que hay dificultades, la principal dificultad es el FMI, las consecuencias del acuerdo».
Sobre la gestión de Sergio Massa al frente el Ministerio de Economía manifestó que “agarró una papa caliente. Necesitamos revisar ese acuerdo con el FMI. El año que viene Argentina tiene vencimientos por 25 mil millones de dólares, solamente entre el Fondo, acreedores privados, deuda privada, sin contar organismos multilaterales. Es necesario un acuerdo sobre cómo desatamos el nudo entre todos los partidos políticos que tengan expectativas de gobierno o representación parlamentaria, en qué hacemos con la economía bimonetaria, quién se lleva los dólares», expresó. “Yo me sentaría con cualquier dirigente político”, adelantó.
También apostó a «definir un desarrollo industrial que permita exportar tecnología y valor agregado, porque eso implica salarios bien remunerados», en lugar de «poner toda la expectativa en los precios de commodities» que, dijo, «son de carácter internacional pero no te aseguran un flujo constante».
Sobre las elecciones de este año, sostuvo que “estamos ante un momento difícil pero que estas eleciones van ser atípicas van a ser de tercios, donde lo importante más que el techo será el piso. Lo importa es entrar la balotaje. A diferencia de las últimas elecciones, hoy el nuevo tercio es la bronca”, alertó.
La vicepresidenta brindó una entrevista exclusiva al programa televisivo “Duro de Domar” por C5N. Fue la primera nota que dió a una señal de televisión argentina en casi 6 años. La última había sido el 17 de octubre de 2017 en el programa Morfi, todos a la mesa, que en ese momento era conducido por Gerardo Rozín en Telefe.
Pasados pocos minutos de las 21 ingresó al canal en un importante operativo de seguridad y ante la presencia de cientos de simpatizantes.
Durante otro tramo de la entrevista que se extendió hasta las 23, Cristina aseguró que “el gobierno de Alberto Fernández es mucho mejor que si Macri hubiera logrado la reelección
. Imaginemos por un instante haber atrevesado la pandemia con Macri. Si me dicen que se puede mejorar lo de hoy con recetas del pasado, yo digo que no”.
Por otra parte, reiteró que no será candidata, “la comprensión de texo es un atributo de la mayoría. Esta muy claro lo que dije el otro día. Además es la ratificación de lo que dije el 7 de diciembre”.
Recordó que si bien “los agravios preescriben a los seis meses, el atentado contra su vida le cambió la vida, es fuerte. Cambie las medidas de seguridad, pero fundamentalmente lo que me impactó es que pensaba que esa época se había superado”.
Durante la entrevista se emocionó cuando habló de su hija Florencia. Ella está «enferma y tiene una patología», ella me «necesita», por lo que advirtió que si le pasara algo «sufriría mucho y podría agravarse su patología».
Por último, la vicepresidenta se definió como una «militante de toda la vida» y agregó que «este año voy a cumplir el papel de siempre, el de una militante política para que lo que considero es lo mejor que les puede pasar a los argentinos, les pase». Y consultada sobre qué espera para el futuro, la exmandataria manifestó su deseo de que «los hijos de la generación diezmada», en la que se ubicó como dirigente, «sean los que tomen la posta».